Mi abuelita me contaba que en el campo era común escuchar al Tue Tue, pero nunca se dejaba ver. Su sonido era algo aterrador y uno podía imaginar una cabeza de bruja con alas, según las historias de boca en boca de los antepasados.

La verdad, ya todo esto suena muy aterrador. Sin embargo, mi abuelita era un tanto avezada y había escuchado también de los antiguos que si oías a un Tue-Tue tenías que invitarlo a tomar el té.

Matías Yáñez González
Tercer lugar regional
Concepción
Región del Biobío
14 años