Después de una larga y hermosa jornada, los vaqueros llegan con su tropa de vacas paridas a la cima de la lejana y nevada veranada.  Estos hombres son tan valiosos y únicos en este mundo moderno; dedican sus vidas al noble rubro ganadero y a su oficio.  Su trabajo es sacrificado y a la vez gratificante, les permite disfrutar una conexión con la tierra y con los animales que cuidan y los que les ayudan a desarrollar sus labores de la mejor forma, como son sus perros y caballos.  Ellos cuidan la materia prima que llegará algún día al plato de un consumidor consciente, quien se preocupa de donde proviene su alimento y como fue producido.  Estas personas aportan de forma diaria, con pasión y dedicación, al mejoramiento del mundo.

Stepanie Bouckaert
Fotografía
Aysén
Región de Aysén
42 años

Denounce with righteous indignation and dislike men who are beguiled and demoralized by the charms pleasure moment so blinded desire that they cannot foresee the pain and trouble.