Había una vez una pastora de ovejas que no tenía hijos.

Un día salió al campo a pastorear las ovejas. Se sentó y de repente apareció un lagarto y ella dijo: “¿Por qué Dios no me da un hijo? Aunque sea como este lagarto”. Entonces Dios la escuchó y un día apareció embarazada. Cuando cumplió los nueve meses, tuvo a su hijo, pero era un lagarto y no uno cualquiera, sino que un rey lagarto. Nació hablando y le dijo: “Mamá, ahora tienes que traerme una mujer para que me sirva, pero no me tiene que ver durante un año; la comida y el desayuno tiene que dejármelos en la ventana y retirarse, no me tiene que ver”.

 

Tamara Lique Cruz
Primer lugar regional
San Pedro de Atacama
Región de Antofagasta
11 años