Hace mucho tiempo había un lugar muy pequeñito en la cordillera de los Andes. Era un pueblo que se escondía a la vista de un humano. En el interior del pueblo se encontraban toda clase de seres mitológicos, animales y más, pero ni un solo humano.

Había un pequeño ser llamado folklor: tenía el cuerpo de un huemul, las alas de un cóndor y podía meterse en el corazón de las personas, pero él aún no lo sabía. También era amable, cariñoso y empático. Se dedicaba a ayudar o, al menos, tratar. Pero un día llegó al pueblo una nube de la maldad, que destruía todo lo que encontraba. Entró al pequeño pueblo y todos los seres trataron de escapar, pero solo algunos lo consiguieron; por suerte folklor logró escapar, pero por poco.

 

Violeta Mendoza Bravo
Tercer lugar regional
Ñuñoa
Región Metropolitana
10 años

Denounce with righteous indignation and dislike men who are beguiled and demoralized by the charms pleasure moment so blinded desire that they cannot foresee the pain and trouble.