Un día, conversando con mi abuela y tomando unos mates, ella nos conversó a mí y a otras personas que había en ese momento, sobre un caso que le ocurrió a su vecina María Elena. Cuenta que ella todos los años tenía una siembra muy bonita. Cuando llegaba el tiempo de la cosecha, no había como esas papas, le faltaban papas para vender. Así se iba programando para el año siguiente, diciendo: “El próximo año sembraré más, así no me faltará para vender y así podré ampliarme y comprar otras variedades de papas; tal vez pruebe con la cabrito o la lengua de vaca”, decía para sus adentros.
Madelein Mansilla Frías
Segundo lugar regional
Quinchao
Región de Los Lagos
13 años